¿Qué es el espasmo cadavérico?

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En el momento del deceso, muchos procesos que tienen lugar en el cuerpo humano se detienen y otros inician. Dentro de ellos está el rigor mortis que se puede confundir con el espasmo cadavérico  que se presenta en el momento en el que se muere, veamos un poco en que consiste.

Como tal, la causa del espasmo cadavérico es desconocida, se presenta de forma usual en muertes violentas o que ocurren en circunstancias de intensa emoción física. Se puede decir que es un fenómeno vital por estimulación nerviosa y es causado por un evento estresante que ocurre antes del deceso.

El espasmo cadavérico solo afecta a parte del cuerpo

El espasmo cadavérico puede afectar a todos los músculos, aunque en general se presenta solo en un grupo específico que abarca brazos o manos. Un ejemplo del espasmo cadavérico se ve en casos en los que se produce el ahogamiento, cuando la persona se aferra a algo como hierba, maleza o raíces, que provee evidencias de vida en el momento en el que se entra en el agua.

El espasmo cadavérico se instaura de modo instantáneo en el momento de la muerte y es por eso que a menudo congela la última actividad que la persona realizó, haciéndola significativa para las investigaciones de las muertes provocadas, dando pistas de la causa de su muerte, es posible que la persona se aferre a lo último que tenía en la mano y esto puede ser utilizado en el proceso.

Diferencia entre espasmo cadavérico y rigor mortis

Como indicamos al principio, el espasmo cadavérico y el rigor mortis pueden llegar a ser confundidos, la mejor forma de diferenciarlos es teniendo en cuenta que el primero se presenta de forma inmediata en el cuerpo, mientras que el segundo aparece en un promedio de 3 a 6 horas después del momento del fallecimiento. Además, el espasmo cadavérico es un proceso localizado en zonas del cuerpo, como una extremidad, como por ejemplo el brazo, mientras que el rigor mortis afecta al cuerpo en su totalidad.

Este fenómeno no solo se presenta en casos de muerte violenta, también puede verse en casos donde la muerte se ha dado por fenómenos que producen grandes hemorragias cerebrales, fulguración, en casos de enfermedades convulsionantes o cualquiera que generen grandes cantidades de estrés al momento del fallecimiento.

El mecanismo fisiológico del espasmo cadavérico tienen un funcionamiento muy similar a la del rigor mortis. Sin embargo, se produce una escala mucho mayor y más rápida, es decir que el músculo que está en posición de contracción, al sufrir una muerte estresante y rápida, no le da tiempo al oxígeno de llegar al músculo y ayudarlo a volver a su posición de relajación en espera de una nueva orden por lo que queda contraído.

Libros imprescindibles de la Tanatopraxia

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La oferta formativa privada para ser técnico en tanatopraxia y tanatoestética es muy amplia, incluso existen algunos centros donde puede tomarse este curso a distancia. Claro está que existen regulaciones que indican que se debe contar con una formación práctica de al menos 160 horas.

Es aconsejable buscar un lugar que cuente con una buena base teórica y que ofrezca realizar las prácticas reales en los lugares adecuados y los tiempos estipulados, esto ayudará a obtener la certificación profesional que demuestra que se está capacitado para ejercer la tanatopraxia, un buen curso propondrá un tiempo estudio de al menos unas 520 horas en módulos de formación.

Áreas de estudio de un tanatopractor

Ahora bien, debes tener en cuenta no depender solo del material que te da el centro de educación, no es lo único con lo que debes contar a la hora de formarte en este cualquier otro tipo de formación. Existe mucha información que pueda ayudar a comprender mejor todo lo que es el mundo de la tanatoestética y tanatopraxia, que puedes encontrar por internet, o mejor aún los textos impresos especializados en el tema.

Debemos resaltar que al estudiar esta carrera técnica, se estudiarán materias relacionadas anatomía, microbiología, parasitología, y principios de medicina legal y forense, además de las técnicas de conservación, embalsamamiento y reconstrucción, legislación, gestión de residuos sanitarios…Por ello, es importante complementar los estudios en el aula, con la lectura de libros de forma que  te contamos algunos que podrán ayudar en esta tarea. Existen varios tipos de libros que pueden brindar información muy buena para un tanatopractor tales como manuales, textos de información específica y por supuesto algunos de instrucción.

Donde encontrar textos de tanatopraxia y cuales son indispensables

Un buen punto de encuentro de ese tipo de libros, además de las librerías tradicionales, son las tiendas en línea tales como Amazon. Estos cuentan con gran cantidad de ejemplares que pueden ser muy útiles como por ejemplo el libro de “Restauración y Reconstrucción en Cadáveres” escrito por Antonio Navarro Ramírez, en el cual se explica la documentación que debe acompañar al cadáver, con datos tales como su identidad, causa de muerte entre otros, esto permitirá definir el tipo de restauración y reconstrucción que pueda requerir.

Dentro de esta lista, también debemos destacar el libro “Extracciones de Tejidos, Prótesis, Marcapasos y otros Dispositivos Contaminantes del Cadáver” como su nombre que ayudará a  identificar los trabajos de extracción que deben realizarse en el cuerpo y como el anterior, contiene la documentación que acompaña el cuerpo. Su temario es muy completo y de fácil lectura y comprensión, las ilustraciones van muy acordes y detalladas.

Por supuesto, otro libro que no te puede faltar es el de “Procesos y técnicas de conservación y embalsamamiento de cadáveres con productos biosidas” que describe el proceso de conservación y embalsamamiento del cadáver no traumático a través de la vía arterial. Libro que se convierte en indispensable, debido a que contienen información de primera mano que sirve para el temario de estudio del curso.

Estos son solo algunos de los libros necesarios para reforzar el estudio de la tanatopraxia y no está de más que estén en tu colección aun si ya tienes tu título, pero quieres reforzar tus conocimientos.

Tanatopraxia en Madrid

Estudia tanatopraxia en Madrid

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¿Quieres estudiar tanatopraxia en Madrid? La profesión de tanatopraxia ha empezado a salir de la sombra, posicionándose como una carrera con largo alcance, gran demanda, fácil acceso y altos salarios. Por lo cual, empieza a ganar posiciones en el mundo laboral, siempre teniendo en cuenta que los profesionales de esta área deben tener acceso a una excelente educación.

Si estás en la ciudad de Madrid y buscas cursos de tanatopraxia en Madrid , te invitamos a conocer un sitio que fue concebido con el objetivo de lograr que este campo se desarrolle como una profesión responsable y de alta calidad. Por supuesto, estamos hablando de Tanatos Formación, un centro de formación de Tanatopraxia y Tanatoestética que cuenta con un nivel de preparación excelente y busca como objetivo principal que sus alumnos tengan la mejor preparación teórico-práctica.

Además, ahora también contamos con la opción de estudiar Tanatopraxia en Galicia, más concretamente en Santiago de Compostela; y en Andalucía, puesto que contamos con la opción de hacer tu curso de Tanatopraxia en Sevilla y también disponemos de un Centro de Tantopraxia y Tanatoestética en Málaga.

Curso de tanatopraxia de Tanatos Formación en Madrid

Formación de tanatopraxia en Madrid Los estándares de este centro de formación ayudan a formar excelentes profesionales a la hora de atender al cadáver y a sus familiares, pues saben que este trabajo no solo se centra en la preparación de difuntos, sino en la ayuda a los familiares para que estos sientan durante este tiempo de trance, al menos la tranquilidad de saber que cuentan con un profesional idóneo en cuanto a la atención de su allegado. Por esta razón, dentro de las asignaturas incluidas en el plan de estudio, se puede encontrar la materia de habilidades Sociales/ Psicología, que se considera de suma importancia.

Comprometidos con una formación de alto nivel el curso de tanatopraxia se imparte de forma presencial, lo que aumenta las posibilidades de salidas laborales en la tanatopraxia y tanatoestética, ya que los estudiantes adquieren todos los conocimientos necesarios para poder desempeñar en este oficio con profesionalidad y anteponiendo el respeto y la dignidad humana.

Además, nuestros cursos están certificados por la Fundación General de la Universidad Complutense de Madrid y homologados por la Comunidad de Madrid.

Horarios, carga lectiva y docentes

La duración del curso es de 12 meses, con una carga lectiva que suma en total 520 horas, repartidas en 360 horas teóricas presenciales y 160 horas prácticas en tanatorios. Para facilidad del estudiante puedes escoger el horario de la mañana o la tarde y hemos incorporado también la opción de horario intensivo los sábados. En total, elijas la jornada que elijas, esta se compone de 8 horas semanales.

Para realizar las horas prácticas se cuenta con convenios con los tanatorios más reconocidos del sector, lo que permite un buen desarrollo de las prácticas de embalsamamiento y conservación cadavérica. Además de forma opcional se puede realizar un curso de refuerzo de 160 horas de prácticas adicionales, dirigido a quienes desean ampliar su formación.

Te invitamos a conocer nuestro programa completo de Estudios de Tanatopraxia y Tanatoestética.

Este curso se ajusta a la preparación del certificado de profesionalidad recogido en el BOE R/D 1535/2011, lo que convierte al centro Tanatos Formación en una excelente opción de formación.

Tanatos Formación se especializa en todos los ámbitos del mundo funerario y cuenta con más de 15 años de experiencia en el sector. Estamos comprometidos con la formación presencial del alumno para que cuente con una salida laboral totalmente eficaz.

Precio curso de tanatopraxia y tanatoestética en Madrid

¿Quieres saber cuánto cuesta un curso de Tanatoestética y Tanatopraxia en Madrid? Para empezar, debes de tener en cuenta que el curso de tanatopraxia y tanatoestética requiere de una serie de requisitos que debe llevar a cabo el centro de formación. Por ello, lo primero que debes hacer a la hora de elegir un centro para estudiar tanatopraxia y tanatoestética es que cumpla con los requerimientos del certificado profesional BOE R/D 1535/2011 y que además te ofrezca la opción de hacer prácticas en los mejores tanatorios de Madrid.

Además, es importante que ofrezca la opción de prepararte para el Certificado de Profesionalidad Oficial de Tanatopraxia, SEPE para poder ejercer como tanatopractor.

Por ello, no  debes de guiarte por aquellos centros de formación que ofrecen cursos a un precio de saldo, si no en aquellos que te ofrezcan realmente la formación y experiencia para formar parte del mundo laboral en el sector funerario.

No lo dudes y pídenos precio para nuestros cursos de Tanatopraxia y Tanatoestética en Madrid. Te esperamos en C/ Sánchez Pacheco 49.

Salario de un tanatopractor en Madrid

El salario que gane un tanatopractor en Madrid dependerá tanto del ámbito donde trabaje como de la formación y experiencia con la que cuente el tanatopractor.

Aparte de nuestros cursos de tanatopraxia y tanatoestética, también contamos con otros cursos para tanatopractores que les aportarán una formación extra y por tanto mayor capacidad para ampliar su campo de trabajo. Si nos centramos en cuánto gana un tanatopractor en Madrid, dependiendo de su formación y experiencia, la empresa que contrate y el convenio a aplicar. Los sueldos pueden llegar a superar la media en España.

 

¿En qué consiste la incineración de un difunto?

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La incineración o cremación es la destrucción de cadáveres y restos humanos por medio del calor en un horno crematorio y que lleva estos restos a ser reducidos a cenizas. A excepción de los cadáveres contaminados por crematorioproductos radiactivos, cualquier otro cadáver puede ser incinerado independientemente de la causa del deceso.

Aunque pudiera parecer un procedimiento de la nueva era, en realidad hablamos de un procedimiento milenario que, según algunos antropólogos, era practicado a finales del periodo neolítico. Incluso se han encontrado vestigios de rituales de incineración en zonas habitadas por los cananeos alrededor de 3000 años antes de Cristo.

La iglesia católica no aprobaba la cremación en un principio, pero en 1963 el Papa Paulo VI levantó la prohibición y unos años después permitió a los sacerdotes católicos la posibilidad de oficiar en ceremonias de este tipo. Aún hoy en día sigue habiendo ciertos sectores seculares que no la aprueban y aquellos que si lo hacen, indican que las cenizas deben enterrarse en vez de ser arrojados al mar, por ejemplo.

Proceso de cremación de cadáveres

Para la incineración de cadáveres se utiliza un horno crematorio que llega a tener temperaturas de hasta unos 900°C, lo que reduce a su mínima expresión todo aquello que entre en él. Para incinerar un cadáver hay que revisarlo en todos los aspectos, esto se hace dentro de un tanatorio donde existe una sala en la que, el responsable de esa labor, hace la inspección completa del cadáver en busca de elementos metálicos, tales como anillos, joyas o cadenas. En caso de ser hallado alguno de estos objetos será entregado de forma inmediata la familia. Si se realizara una ceremonia de ámbito religioso, se espera a terminar la misa y la velación del difunto. En ese momento el cuerpo es colocado en una cámara que se llama “retorta”, donde se puede seguir todo el proceso y controlarlo por grandes ordenadores.

Durante el proceso de cremación, órganos y otros tejidos son vaporizados, lo que queda son fragmentos pequeños de huesos, restos que son sometidos en otra máquina llamada cremulador, que termina de reducirlos a cenizas. Para que no haya riesgo de error con las cenizas, se introduce en el horno una placa resistente al fuego con los datos del occiso y esta es entregada junto con las cenizas y un certificado de cremación dentro de una urna, la familia recibe los restos normalmente unos días después y la urna estará sellada y pesa 2.5kg aproximadamente.

A partir de ahí, los familiares son libres de hacer con las cenizas lo que deseen, algunos optan por dejarlos en espacios habilitados del cementerio, otros los conservan en su propio domicilio e incluso hay casos donde algunas funerarias ofrecen realizar un diamante con el carbono que se obtiene de las cenizas del difunto. En aquellos casos donde se quiere esparcir las cenizas en el mar, debe realizarse a través de entidades autorizadas para ello, generalmente a más de 5 millas de la costa.

Precauciones durante las cremaciones

Algunas cosas que no suceden en una cremación son las siguientes:

  • No se cremará más de un cadáver a la vez en el mismo horno
  • No se incinera un cadáver que esté fuera del ataúd
  • No se incinera un cadáver antes de que hayan transcurrido al menos 24 horas desde su fallecimiento
  • No se puede incinerar un difunto judicial sin tener permiso del juez.

Es importante saber cómo es la despedida de nuestro ser querido, pues deseamos que éste sea despedido de la tierra con todos los honores, por lo que debemos entender que los empleados de un tanatorio son personas como nosotros y que desarrollan su trabajo de la mejor forma posible.

Tanatopraxia: Mucho más que maquillar muertos

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La tanatopraxia no consiste simplemente en maquillar muertos, si no que se considera como el conjunto de técnicas para demorar la descomposición final de un cuerpo por un periodo de tiempo necesario. Esta profesión suele tener a la tanatoestética como acompañante. Generalmente quien estudia para ser tanatopractor debe tener como parte de su instrucción la tanatoestética, que es la parte que enseña a como maquillar, vestir, peinar, arreglar las cejas, afeitar, quitar ojeras, disimular los hematomas, entre otras, ayudando a tratar de dejar el cadáver con el mejor aspecto, simulando un sueño profundo.

La Tanatoestética solo ocupa alrededor de unas 30 horas de las 360 horas totales del curso. En los últimos años se ha visto un aumento considerable de la demanda de esta profesión, existen departamentos de anatomía de histología humana que vienen realizando, desde hace algunos años, cursos en esta disciplina con la idea de mejorar la formación profesional.

Lo que implica la profesión de tanatopraxia

Esta profesión representa una gran responsabilidad, por ello es necesario obtener una serie de conocimientos y aptitudes que sólo se logra a través de la formación. Valga resaltar que si quieres ser parte de este grupo de profesionales, la mejor opción es buscar cursos en organismos oficiales y homologados por el ministerio educación. Es muy importante que esta formación incluya horas prácticas presenciales en tanatorio. En Tanatos Formación contamos con cursos que tienen una intensidad de 360 horas teóricas y 160 horas prácticas con profesionales donde se ve todo el proceso funerario con al menos unos ocho cadáveres.

Un buen tanatopractor debe tener conocimiento muy profundo en varias áreas como son:

  • Todo lo relacionado con la anatomía humana.
  • Medicina legal y forense.
  • Aspectos de medicina preventiva.
  • Conocimientos de tanatoestética, entre otros muchos

Por supuesto, el perfil del aspirante es un aspecto fundamental para poder desarrollar ese trabajo. En el caso de la tanatopraxia este puede ser variado debido a la flexibilidad permitida para ejercer la profesión, desde personas que disponen del grado en ESO hasta personal sanitario y perfiles con estudios relacionados con el ámbito la salud pueden realizar su curso de tanatopraxia y conseguir la capacitación necesaria para introducirse en el mercado laboral de la funeraria.

¿Qué puedes esperar de la profesion de tanatopraxia?

Dentro del temario el curso de tanatopraxia puedes encontrar cosas tales como: cambios corporales post morten, que es la muerte, conservación natural, cosmetología de presentación, descomposición, restauración cadavérica, modelado, utensilios de maquillaje, aseo y protección entre otros. También es vital conocer toda la normatividad dedicada a la higiene, desinfección y prevención de infecciones entre otros.

Existen por supuesto, aspectos que no se aprenden en un salón de clases o un lugar de prácticas, para este trabajo no se debe ser un artista el maquillaje y la reconstrucción, también debe ser una persona muy práctica y saber cómo tratar a las personas. Debemos recordar que para los familiares son momentos muy duros que los dejan en un estado emocional frágil, por lo que agradecerán cualquier apoyo extra y que se les trate con diligencia y respeto.

Es importante tener en cuenta que no todo el mundo está preparado para trabajar en este sector, debemos recordar que se tendrá contacto con cadáveres y que en muchos casos puede que no estén en buen estado en el momento de empezar a trabajar con ellos. Por decirlo de una forma coloquial, se debe tener un estómago fuerte, así que si cumples con estos requisitos puedes intentar incursionar en este mundo.

¿Cómo eran los ritos funerarios de los egipcios?

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La muerte ha acompañado al hombre durante toda su existencia y hubo muchas culturas que tenían diferentes conceptos sobre la vida y la muerte. Esto se puede evidenciar en los orígenes de sus creencias. Por ejemplo, en el antiguo Egipto, en los tiempos pre dinásticos (antes de las dinastías) los cuerpos egipcios eran enterrados desnudos y en posición fetal en las calientes arenas del desierto, lo que hacía el proceso de putrefacción del cuerpo mucho más lento. Por ello, cabía la posibilidad de que alguno de estos cadáveres aflorara a la superficie de tal forma que se llevaba a pensar que el cadáver se movía, que podía vivir y por supuesto que había vida tras la muerte.

La evolución de esta creencia llevó a los egipcios a creer que el cuerpo y el espíritu inmortal se reunirían para vivir otra vida en el paraíso, por lo que el cuerpo debía ser momificado de forma que fuera protegido de la putrefacción. La energía vital permanecía en el recinto mortuorio, y por ello, junto a los difuntos se enterraban víveres y estatuas que representaban ayuda para él, la parte espiritual debía abandonar el cuerpo durante el día y regresar por la noche.

Como acceder a una momificación

En un principio todos estos ritos funerarios eran diseñados para los faraones, ya que al ser representaciones de los dioses en la tierra, al morir adquirían estatus divino. Sus cuerpos y almas debían de mantenerse resguardados para la próxima vida. Sin embargo, tras la revolución del culto funerario, el hombre común ya podía acceder a la otra vida por medio de los rituales de la momificación y el entierro entre los que se incluían la ceremonia de apertura en la boca entre otros.

El proceso de embalsamamiento se realizaba especialmente si se trataba de alguien de la realeza o una persona con recursos. Tales ritos llegaron a su máxima expresión en la IV Dinastía, incluso se ha llegado a encontrar animales embalsamados. Mantener el cuerpo intacto era algo primordial para que el difunto pasara a la otra vida, y ser momificado en especial al ser enterrados en tumbas. Era un lujo practicado por todo aquel que se lo podía permitir. Llegaron a existir tres tipos diferentes de servicio, el más económico consistía en quitarle al cuerpo las entrañas y sumergir el cadáver en natrón durante 70 días.

Proceso de momificación en el Antiguo Egipto

La tarea de momificar a un difunto rey y reina tomaba un tiempo aproximado de dos meses. La conservación del cuerpo tenía un vínculo directo con el hecho de perpetuar el recuerdo del difunto. Por lo tanto, a los ricos y poderosos, incluidos los faraones, se les hacía un embalsamamiento que consistía en colocar el cuerpo en una tabla y hacer un corte en el abdomen para extraer todos los órganos a excepción del corazón que dejaban en el interior del cuerpo sin tocarlo ya que tenían la creencia de que en él residía la vida del difunto.

Los egipcios tendían a sacar el cerebro de los cadáveres puesto que para ellos no era importante. Lo hacían a través de la rotura de la capa de hueso y a través de una fina vara con forma de gancho a través de  la nariz se agitaba el cerebro hasta que se volvía líquido y posteriormente era vertido a través de la misma. Finalmente se limpia la cavidad craneal con lino y se cubría con resina caliente para sellarla. Después de toda esta operación se sumergía el cadáver en natrón, sustancia química que deshidrata el cuerpo y prolonga su conservación, en este momento, se amortaja al difunto con lino y la tela se pegada al cuerpo con resina.

Para el acto funerario después de realizar la momificación del difunto, era necesario que un sacerdote realizara el ritual de la apertura de la boca, esto aseguraba que la persona respiraba en el más allá. Luego los sarcófagos eran tirados por bueyes mientras se cantaba y recitaba algunas composiciones, un sacerdote iba derramando leche por el paseo y otro iba detrás del sarcófago quemaba una especie de incienso en el aire para purificarlo, se solía enterrar con la persona algunas de sus riquezas, estatuas y alimentos, se le llamaba ajuar funerario.

Algunas de estas creencias aún perduran en la cultura funeraria mediterránea moderna que tiene en común con estas civilizaciones la idea de que hay una vida mejor después de la muerte.

Curso de Tanatopraxia y Tanatoestética

Madrid: C/ Sánchez Pacheco, 49, 28002 Madrid | Tel: 622 710 075 | info@tanatosformacion.com
Santiago: C/ San Pedro de Mezonzo, 7, 15701 Santiago de Compostela | Tel: 633 657 624 |info@tanatosformacion.com
Sevilla: Avda. Averroes, 8 – Edif. Acrópolis, 41020 Sevilla | Tel: 636 645 541 | info@tanatosformacion.com
Málaga: C/ Néstor Almendros, 35, 29010 Málaga | Tel: 613 024 359 | info@tanatosformacion.com

¿Qué conocimientos debe tener un tanatopractor?

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El oficio de la tanatopraxia está ganando una aceptación abrumadora, son cada vez más las personas que se animan a aventurarse en el mundo del tanatopractor, en esta época de crisis laboral. Esta tendencia no es inesperada, pues uno de los principales puntos fuertes de la profesión es su salario que puede rondar los 1700€.

Esta profesión está teniendo un auge tan impresionante debido a la necesidad de mantener el cuerpo del difunto durante unas horas o incluso días, pues los velatorios pueden llegar a extenderse y es necesario que el último recuerdo que la familia tenga de sus fallecidos sea lo más apacible posible.

¿En qué consiste el oficio de un tanatopractor?

El objetivo principal del tanatopractor es darle al fallecido una apariencia apacible por medio de las técnicas adecuadas para ello y teniendo en cuenta cuál era la apariencia de la persona antes de fallecer. Esta no es una tarea sencilla, se requiere de un trabajo especial dentro de unas condiciones especiales y por lo tanto un tanatopractor debe tener  características y  conocimientos específicos.

Entre los conocimientos obligatorios de un tanatopractor, se pueden contar los siguientes:

  • Conocimientos sobre la anatomía humana y las bacterias que pueden actuar en los cuerpos en descomposición.
  • Conocimientos y habilidad en el manejo de herramientas quirúrgicas.
  • Conocimiento en profundidad de los procedimientos de seguridad y salud.
  • Conocimiento en el momento de usar productos químicos para la preparación utilizada en la conservación de un cadáver.
  • Conocimiento en el uso de máquinas especiales para su trabajo, como por ejemplo las bombas eléctricas, entre otros.
  • Conocimiento y habilidad para realizar trabajos de reconstrucción y aplicación de prótesis, importante en casos donde el fallecido estuvo involucrado en un accidente y puede necesitar reconstrucciones faciales o corporales, algunos tanatopractores se especializan en el área de la reconstrucción.
  • Amplio conocimientos en las técnicas y productos adecuados para el embalsamamiento.
  • En la mayoría de los casos, deben complementar el trabajo primario de la tanatopraxia con la tanatoestética, que permite una correcta aplicación de maquillaje y peluquería.

Perfil del tanatopractor

Esta es una profesión que no solo necesita una amplia gama de conocimientos y habilidades en cuanto a la parte técnica se refiere, pues un tanatopractor no sólo trata con el cuerpo del difunto. También debe afrontar situaciones delicadas en el momento de tratar con los familiares y amigos del occiso. Es por ello que necesitará también de algunas características personales muy importantes en el momento de tratar con las persona. Además el hecho de tratar con el cuerpo de una persona fallecida también conlleva algunas características puntuales dentro de las que podemos encontrar:

  • La persona debe tener una actitud responsable.
  • Debe ser capaz de trabajar en equipo.
  • Debe ser una persona que presta especial atención al detalle.
  • Debe ser una persona sumamente respetuosa no solamente en el momento de trabajar con el cuerpo del fallecido sino también en el momento de afrontar situaciones angustiantes con los familiares del mismo.
  • Debe seguir unos estándares propios y ser expertos en higiene, salud y seguridad.
  • Debe ser sumamente meticuloso.
  • Debe poseer habilidades prácticas.
  • Tener la capacidad de socializar de forma profesional con las personas allegadas al difunto.
  • Tener buen estado de salud y buena condición física, pues se manejarán diferentes pesos corporales.

El oficio de un tanatopractor es difícil, tanto física como psicológicamente, es fundamental una buena preparación para poder ejercer esta profesión. Una vez que se está ejerciendo esta profesión, te darás cuenta que es uno de esos trabajos donde se podrá ayudar a muchas familias en los momentos más difíciles y que deja una satisfacción enorme.