Hoy os traemos una entrevista a la Directora de Tanatos Formación, Mª Jesús Andión y a nuestro Gerente Juan Miguel Aglio donde explican en qué consiste la formaciónn de Tanatopraxia en nuestro centro y porqué es la mejor opción para formarse en este área.

¿Qué es Tanatos Formación?

M.J. Andión: Tanatos Formación es una empresa de formación que pretende brindar una salida laboral a todas aquellas personas interesadas en el ámbito funerario. Para ello nos ajustamos de manera estricta a la normativa vigente en la actualidad, preparando a nuestros alumnos para el certificado de profesionalidad, según dicta el BOE 1553/2011. Esta preparación tan exhaustiva y especializada, en un mundo tradicionalmente muy hermético, es precisamente la que nos ha hecho destacar por encima de otros centros, siendo además pioneros en el sector al conseguir certificado por la Fundación General de la Universidad Complutense de Madrid

¿Cuánto tiempo lleváis ofreciendo vuestros servicios?

J.M. Aglio: Creamos este innovador y ambicioso proyecto hace cuatro años en Madrid tras constatar el vacío existente a nivel de formación en el sector funerario.

M.J. Andión: En 2017 ampliamos  nuestra formación a Santiago de Compostela y en 2018 a Sevilla, para cubrir las necesidades existentes en estas comunidades. En estas sedes impartimos formación en diferentes horarios con el objetivo de flexibilizar y solventar en la medida de lo posible las dificultades de desplazamiento desde otras provincias y posibles incompatibilidades de horarios laborales. Próximamente nos extenderemos a otras comunidades, que ya nos están demandando cursos de formación.

¿Qué tipo de cursos se imparten en el centro?

J.M. Aglio: Debido a la alta demanda existente, hemos centrado nuestros esfuerzos especialmente en la formación en tanatopraxia. Ésta incluye el curso de tanatopraxia pero también formación complementaria con el curso de suturas que prepara a los alumnos de cara a las prácticas en tanatorios.

M.J. Andión: Asimismo, ofrecemos seminarios orientados a ahondar más en la materia, a las cuales se pueden inscribir los empleados de tanatorios que deseen ampliar sus conocimientos.

¿Qué le otorga carácter diferencial a vuestros cursos?

M.J. Andión: Somos uno de los únicos centros que se adaptaba a la legislación establecida en el BOE, la cual incluye 360 horas de formación teórica presencial y 160 horas de prácticas en tanatorios. El ser los únicos certificados por la Fundación General de la Universidad Complutense de Madrid también nos hace diferentes a otros centros. Cabe señalar que a nuestra sede de Madrid acuden alumnos de otras comunidades autónomas pues no existe otra formación similar a la nuestra.

J.M. Aglio: Como he comentado anteriormente, nuestro proyecto nace de la sorpresa al comprobar un importante nicho de mercado en el sector funerario en cuanto a formación. Tradicionalmente los puestos de trabajo en el ámbito funerario se cubrían de manera no especializada, sin ser necesaria formación, por lo que ahora está costando mucho cambiar esta filosofía de trabajo en los tanatorios, que inicialmente eran muy reacios a admitir alumnos en prácticas. Es por ello que tuvimos que demostrar con hechos los beneficios de una formación altamente cualificada, y ahora son los propios tanatorios los que nos solicitan tutorizar a alumnos, muchos de los cuales terminan trabajando en el sector. Esperamos en breve ampliar nuestra formación a otras comunidades con el fin de cubrir la alta demanda en la industria funeraria de personal profesional cualificado y capacitado para trabajar en tanatorios.

¿Cuál consideráis que es la clave del éxito de vuestro centro?

J.M. Aglio: La clave es la seriedad, el hacer las cosas bien, de acuerdo a la legalidad vigente, así como el rigor profesional. También es creer realmente en lo que hacemos y en lo que ofrecemos poniendo de manifiesto que es posible hacer de la tanatopraxia una profesión seria, cualificada y con proyección laboral.

¿Qué perfil de alumnos acuden a Tanatos Formación?

M.J. Andión: La demanda de nuestra formación es creciente en Madrid y alrededores. Sin embargo, no existe un perfil homogéneo de alumnos, pues recibimos tanto personas sin ningún tipo de contacto previo con la tanatopraxia como personas que han empezado cursos en otros centros y han decidido finalmente cambiarse al nuestro o, incluso, tanatopractores que ejercen en la actualidad y deciden inscribirse en nuestros cursos de reciclaje y formación complementaria.

J.M. Aglio: Lo único que exigimos es una alta motivación y capacidad para aprender. En este sentido, nuestros alumnos se someten a entrevistas rigurosas de selección, en las que valoramos su grado de motivación y compromiso para el trabajo.

¿El balance del tiempo que lleváis en funcionamiento es positivo?

J.M. Aglio: Sí. La resistencia por parte de los tanatorios a acoger alumnos en prácticas ha disminuido al comprobar que nuestros alumnos llegaban con una formación de calidad, incluso muchos de ellos han pasado a formar parte de la plantilla del tanatorio en el que hicieron las prácticas. Éste es un motivo más de satisfacción para nosotros y de creer en nuestro proyecto.

M.J. Andión: Nuestras perspectivas son buenas y la demanda va en aumento. Esperamos que poco a poco los tanatorios confíen en nuestra formación y den la oportunidad a nuestros alumnos de poder demostrar su alto grado de preparación.

La tanatopraxia es una práctica que requiere la aplicación de protocolos de seguridad para evitar accidentes. En primer lugar hay que resaltar que se está trabajando con cadáveres y por lo delicado de esta labor hay que prevenir y evitar los riesgos biológicos, químicos y hasta psicológicos a los que esté expuesto el personal.

Cuando hablamos de bioseguridad en la tanatopraxia nos referimos a las técnicas, el equipamiento y los conocimientos que se deben emplear para preservar los espacios, las personas y el medio ambiente de agentes infecciosos o de riesgos biológicos potenciales a los que se exponen a diarios durante la jornada laboral y así minimizar los accidentes.

Normas de bioseguridad durante el procedimiento de tanatopraxia

• Personal profesional: el personal que va a realizar la tanatopraxia debe estar calificado en el manejo de cadáveres, desechos biológicos y agentes bioquímicos que se utilizan durante estos procedimientos y sobretodo estar informado de los riesgos que corre durante la ejecución de este trabajo.
• La utilización de vestimenta especial: Durante la aplicación de estos procesos se debe contar con mascarillas de tipo pantalla facial, gafas o lentes. El uso obligatorio de guantes que resistan los microorganismos, de ser posible resistentes a pinchazos y/o cortes para mayor protección, calzado de seguridad y la ropa adecuada para esta práctica deben ser, resistente a las salpicaduras y no reutilizable. La OMS recomienda el uso de batas de plastico. Además, se hace necesario colocar en sitios visibles al personal carteles que indiquen “RIESGO BIOLÓGICO” para que no transiten sin la vestimenta adecuada en las áreas de trabajo.
• Protección de vías respiratorias: es muy importante el uso de equipos especiales sobre todo para proteger las vías respiratorias por ser esta la principal vía de contagio biológico. La preparación de cadáveres a consecuencia de alguna enfermedad respiratoria como tuberculosis o meningitis y difteria, hace obligatorio el uso de mascarillas autofiltrantes. Así como también si hubiera riesgo de inhalación de bioaerosoles.
• Higiene en la sala de tanatopraxia: se recomienda el uso de equipos de acero inoxidable para facilitar la limpieza y debida desinfección, la sala debe estar dotada de desagües y siempre verificar que todo el material esté debidamente esterilizado. Del mismo modo la ventilación adecuada en la sala es de vital importancia para el trabajo y la conservación de los cadáveres.
• Vacunación del personal: al personal que trabaje en la tanatopraxia se le recomienda tener su esquema de vacunación actualizado con las vacunas de la tuberculosis, hepatitis B y DTP (difteria, tosferina y tétanos).
• Precaución en el uso de químicos: en el proceso de la tanatopraxia es posible que se emplee el uso de sustancias químicas para la conservación de los cadáveres. En la actualidad existen diversas sustancias que no son tan contaminantes como las que contienen aldehídos, metanol e hipoclorito de sodio. En los casos que se utilicen sustancias que contengan estos componentes se debe seguir las instrucciones de seguridad que traen impresas a fin de minimizar los riesgos químicos.

• Manejo de los desechos biológicos: el personal de tanatopraxia debe manejar con mucho cuidado los desechos biológicos que se generen durante la preparación de los cadáveres. Para ello, deben contar con depósitos rígidos que eviten derrames y contaminación de otras superficies. En estos depósitos también se deben colocar los instrumentos cortantes y punzantes tras su uso.

Para finalizar es importante destacar que la preparación y conservación de los cadáveres es un proceso delicado y complejo por lo que se hace necesario seguir un protocolo metódico para evitar cualquier descuido de alguna de las normas antes mencionadas en cuanto a la bioseguridad del tanatopractor, ya que aunque siempre estará expuesto a algunos riesgos, esto servirá para minimizarlos considerablemente.

Si quieres estudiar Tanatopraxia no dudes en contactar con Tanatos Formación donde te facilitaremos todas nuestras credenciales e información para que puedas formarte en esta profesión en alza.

Ponte en contacto con nosotros a través del 911 388 999 o info@tanatosformacion.com